La «Agenda M» del segundo grado de la Escuela Normal «José María Torres», se propuso el abordaje del tema: «mujeres que dejaron huellas en nuestro País».
La intención es que los niños y las niñas identifiquen trabajen sobre imágenes alusivas a la relación Mujer y Memoria, haciendo hincapié en la trayectoria en DDHH de las Abuelas de Plaza de Mayo.
Mural Blanco
Los trabajos que realizaron los niños quedaron expuestos en una hoja A4 para luego formar parte de la muestra “EL MURAL BLANCO”, donde los/as niños/as podrán contar sobre esas mujeres y su lucha.
La escuela emerge entonces como institución privilegiada para la formación de niños, niñas y jóvenes en ambientes en los que se puede hablar, preguntar, investigar y ejercitar la práctica activa de traer a nuestro presente aquellos hechos que han dejado huella. Pero estas experiencias deben poder trascender al aula y constituirse como herramientas que nos permitan convocar a todos los sectores y todos los actores de la sociedad civil para poder corporizar esta memoria en acciones concretas contra el terrorismo de Estado, el autoritarismo, la xenofobia, y a favor de la diversidad cultural.
Esta muestra es reflejo de la potencia del arte para conmovernos. Los cuadros y murales que forman parte de ella nos invitan a detenernos, a observar y a observarnos, a preguntarnos acerca de los alcances de Abrir caminos de diálogo. Urge el deber ético y moral de mantener viva la memoria, de recuperar testimonios, de entender que el pasado es siempre una dimensión del presente. Los hechos trágicos que trae esta muestra a nuestro presente replican otros tantos momentos de la historia reciente que evocan la discriminación, el odio, la injusticia. “Murales por la Memoria” se convierte así en una importante presencia para las políticas de educación y memoria en cada escuela, en cada aula. Porque son los espacios de encuentro los que nos permiten reflexionar con otros para abrir caminos.